Cuando intenta ser el anfitrión perfecto una cena en casa con sus amigos puede ser un verdadero quebradero de cabeza. Tener todo listo para la noche ocupa tiempo, dinero y, sobre todo, imaginación. No es fácil decidirse por los platos, el mantel, las velas o incluso la música que debería sonar. Por ello quiero dedicar este post para facilitarles las cosas en su próxima cena o comida.
El primer desafío comienza cuando debemos limpiar y preparar la casa. Debemos ser previsores y estar preparados en el caso de que nuestros invitados decidan traer un acompañante de última hora. Será bueno realizar una lista de los ingredientes o útiles necesarios y un planning con los tiempos que nos puede ocupar cada tarea, pues no hay nada más desesperante que hacer esperar a los invitados sentados a la mesa esperando con los estómagos vacíos a que salgan las cosas del horno.
No olviden preguntar a los comensales sus alergias o intolerancias, a menos que quieran que la noche acabe en tragedia. Seguramente también cuenten con algún invitado vegetariano, para lo que deberemos adaptar los platos u ofrecer otra alternativa.
Si no queremos arriesgarnos con la comida, podemos contratar un catering a domicilio. Esta práctica se ha puesto muy de moda, de esta manera nos ahorramos la limpieza y podemos disfrutar de la cena sin preocuparnos de cuándo estará lista la comida o de cuán tarde tendremos que acostarnos para recoger todo. Ahorita con internet es más sencillo que nunca contratar un catering y podemos realizar comparativas de precios buscando en webs específicas como Fixando para ello.
Espero que les haya gustado mi primer post, no duden en dejar sus comentarios con sus experiencias, cuentenme si les sirvieron mis recomendaciones o dejen sus propios consejos!
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