En España hay varios regímenes fiscales para empresarios individuales o autónomos. Aunque el sistema es tan complejo que lo mejor es hablar con un contable, vamos a intentar explicarte los distintos regímenes fiscales que se aplican a autónomos.
El Régimen de estimación directa es obligatorio para negocios que manejen más de 600.00 euros al año y voluntario para los demás. En este caso, tendrás de llevar el libro diario, el libro de inventario y las cuentas anuales. Sin embargo, no tienen que presentarlos antes el registro mercantil.
El Régimen de estimación directa simplificada es lo más común para profesionales que manejen más de 600.00 euros al año. En este caso, los autónomos no tendrán que llevar contabilidad pero sí tienen que determinar los beneficios de su negocio.
El Régimen de estimación objetivo es el régimen de módulos y es voluntario. En este caso, tampoco hay que llevar contabilidad.
Ningún régimen es mejor que el otro, tendrás que ver cuál es más rentable en tu caso. Cuando optas por un régimen de estimación directa, podrás deducir tus costos en el IRPF. Por lo tanto, si tienes muchos gastos, puede ser compensatorio llevar contabilidad. Pero, si tienes dudas, busca servicios de contabilidad.
Entre los gastos que puedes deducir se incluyen los consumos de explotación, gastos de personal y seguridad social, alquileres, reparaciones, suministros, servicios de profesionales independientes, servicios exteriores, tributos deducibles (IAE, IBI), gastos financieros y amortizaciones. Además, llevar contabilidad te puede ayudar a aprovechar beneficios fiscales específicos para ciertas actividades o sectores.
Por lo tanto, realmente debes hablar con alguien para que estudie tu caso. Aqui puedes ver los precios de servicios de contabilidad para hacer un consulta.
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