Quizás no pensemos en las puertas como parte de la decoración, pero no es así. Pintar las puertas de casa de blanco o de un color vivo cambia totalmente el look de tu hogar. ¿Y lo mejor? Puedes hacerlo tú mismo con este paso a paso para pintar puertas de madera.
Preparar los materiales
No hay nada peor que empezar a pintar puertas de madera, tenerlas ya fuera de su sitio y a medio pintar, solo para darte cuenta que no tienes materiales suficientes para terminar el proyecto. Así que, antes de empezar a pintar las puertas de tu casa, piensa bien si tienes todos los materiales suficientes. Lo primero que debes calcular es la cantidad de tintas que vas a necesitar (contando con todas las manos que vas a aplicar, generalmente serán 3) – haz la cuenta a los metros cuadrados y sigue las instrucciones del fabricante para saber cuantos metros cubre cada envase de tinta. Después asegúrate que tienes papel-lija, pincel, una cinta de pintor y esmalte (opcional).
Preparar la puerta
Ahora sí que estamos listos para empezar. Lo primero que hay que hacer es retirar la cerradura, manivelas, pestillos, etc e proteger las bisagras, los marcos y molduras con una cinta de pintor. Lo segundo es masillar todos los golpes, rayas o daños. El tercero es lijar toda la superficie hasta que se quede perfectamente uniforme y sin huellas de tintas o golpes anteriores. Ya está casi, casi: solo queda pasar un paño húmedo y pasamos a la etapa siguiente.
Pintar una puerta de madera
Si vas a estrenar pincel, pásalo por agua para eliminar pelos sueltos (de contrario, se quedarán en la pintura). Haz movimientos circulares cuando tiras la tinta del envase para que el color sea homogéneo. Además, cierra bien el envase de un día al otro para que no se seque entre demanos. Intenta abrir las ventanas para que el olor no se entrañe en tu casa, especialmente si vas a usar esmalte.
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