Es imposible encontrar a alguien que nunca haya quemado nada en una sartén o incluso en un horno mientras cocinaba. Al final, es muy fácil distraerse y cuando nos damos cuenta, ya es demasiado tarde. Pero si la comida ya no puedes salvarla, ¿qué decir de las sartenes y ollas? ¡Hoy te explicamos cómo limpiar sartenes y ollas quemadas!
Agua y sal
Si la situación no es tan grave y la comida no se atasca en el fondo, la mejor alternativa es limpiar la sartén con agua y sal. Retira la mayor cantidad posible de comida y lava normalmente con detergente, esponja y agua caliente. Luego cubre las partes quemadas con agua caliente limpia, agrega tres cucharadas de sal y remoja por 15 minutos. Frota con un cepillo y, si todavía queda algo de comida atascada, repite el proceso.
Vinagre
El vinagre blanco tiene muchos usos en las tareas del hogar y también funciona para este caso. Si la sartén quemada es de acero inoxidable, ten cuidado al fregar. Cubre todas las partes quemadas con vinagre y deja hervir durante unos cinco minutos. Luego déjalo enfriar y frote el residuo suavemente con una esponja suave.
Detergente
Cubre el fondo quemado de la sartén con agua caliente y agrega detergente para el lavavajillas. Luego, solo tapa la sartén y hierve a baja temperatura. Cuando el agua esté burbujeando, apaga el fuego, espera a que se enfríe y frota cualquier alimento atascado con un cepillo o lana de acero.
Bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio es un gran aliado en la limpieza y ayuda a salvar sartenes muy quemadas. Extiende el producto en el fondo de la sartén, agregue dos cucharadas de agua y hierva. Cuando el agua comience a burbujear, apágala, espere unos minutos y frota con lana de acero.
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