La campana extractora es un electrodoméstico imprescindible para quienes viven en pisos pequeños. Pero cuando el filtro de la campana empieza a acumular grasa, es normal que la capacidad de extracción disminuya. Entonces empieza a oler la comida por toda la casa, el vapor de agua se acumula en el techo, etc. Aquí te explicamos cómo limpiar la grasa de la campana/ extractor de cocina:
Haz una limpieza regular
En lugar de hacer una limpieza profunda cuando ya no queda mucho por hacer, intente limpiar la campana con regularidad. Si necesitas ayuda con las tareas del hogar, busca servicios de limpieza del hogar recurrente en Sevilla y limpieza del hogar recurrente en Madrid para programar una limpieza semanal, quincenal o mensual.
Deja correr el vapor de agua
Una de las formas más sencillas de limpiar la campana extractora es hervir una olla de agua con vinagre y jugo de limón. El vapor que desprende esta emulsión “ablandará” y “despegará” la grasa de la campana (de la misma forma que el agua caliente ayuda a fregar los platos, por ejemplo).
Desmontar la campana
Apaga la electricidad en el tablero de la cocina. Cuando la campana se haya enfriado, sácala. Ahora, puedes desmontar la campana extractora para limpiar las rejillas y el filtro.
Ponte a trabajar
¡Es hora de fregar las rejillas! Usa detergente para lavar platos (que generalmente es un desengrasante) y déjalo actuar durante varios minutos. Es importante utilizar un cepillo suave o una esponja para no dañar la campana. ¡Usa siempre agua caliente para que sea más fácil!
Cambia el filtro
Si el filtro ya no tiene arreglo posible, cambialo. Puedes encontrar filtros universales para campanas extractoras en casi todas las tiendas de electrodomésticos. Simplemente saca el actual y reemplázalo por uno nuevo.
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