Se acerca el verano. Muchas personas empiezan a hacer dieta en esta época del año, pero ten en cuenta que debes tomar otras precauciones para preparar tu cuerpo para el verano.
Empieza a salir.
El primer paso para preparar tu cuerpo para el verano es tener confianza. Empieza a salir más de casa, absorbe vitamina D y retoma un estilo de vida más activo, lo que abre el camino para volver al ejercicio.
Haz ejercicio de nuevo.
Vuelve a hacer ejercicio, incluidos los ejercicios de peso corporal, caminatas, ciclismo, etc. Si pasaste mucho tiempo encerrado en casa, retoma la actividad física poco a poco y recupera fuerzas. Consejo extra: busca un servicio de entrenamiento personal para tener un plan personalizado a tus necesidades.
Evita los azúcares.
Otra forma de preparar tu cuerpo para el verano es evitar los azúcares. Son los azúcares que se acumulan alrededor de la barriga, por lo que están prohibidos en esta misión. Sin embargo, esto no incluye los “azúcares de la fruta”: ¡3 a 5 piezas de fruta al día siguen siendo saludables! Busca a un nutricionista para saber qué alimentos eliminar o no de su dieta.
Compre frutas y verduras de temporada.
Prefiere frutas y verduras de temporada para hacer una dieta equilibrada y sostenible, porque puedes utilizar productos locales y con menos conservantes. Guiarse por los ingredientes de la temporada es más eficaz que cualquier dieta, sin mencionar que también es más económico.
Hidrata tu cuerpo y tu piel.
Antes del verano, necesitas hidratar tu cuerpo. Beber al menos 1,5 litros de agua al día, utilizar cremas para hidratar el cuerpo y compensar el uso de alcohol y desinfectantes (que deshidratan la piel), y evitar problemas dermatológicos provocados por el sol.